martes, 20 de agosto de 2013

Vacaciones con amigos

Seguro que pensabais que ya no volvía, yo también lo creí. La semana pasada no pude resistirme y finalmente caí en la tentación de irme unos días a la playa y la vuelta ha sido más dura de lo que imaginaba. Eso si, me he puesto tan morena que ríete tú del mismísimo Valentino...
El mes de Agosto va pasando lentamente, ya vamos por la tercera (o cuarta porque algunos hicieron trampa y empezaron el 29 de Julio) semana de reposiciones en la televisión y presentadores sustitutos en los programas que han decidido seguir emitiendo en directo. Si pones el telediario (ya sabéis que sigo siéndole fiel a Matías aunque esté de vacaciones) ves las mismas noticias de todos los años, las cuales yo creo que también son reposiciones: calor extremo, alguna tormenta de verano, operación salida/entrada, incendios y algún “guiri” al que se le va la cabeza y se va a Mallorca a saltar desde un balcón de un hotel.
Según mi opinión lo único decente que ponen estos días por la televisión son los ultra-repetidos capítulos de los Simpsons, los cuales te sabes de memoria pero que por nada del mundo dejarás de ver.
Por otro lado la jornada intensiva hace que descubras nuevos programas de televisión que jamás habíais visto, este verano me he vuelto muy fan de "Empeños a lo bestia", sobre todo de sus guardias de seguridad. ¿No conocéis el programa? en ese caso os ordeno que lo veáis en breve, prometo que no os arrepentiréis.
Si queridos lectores, el mes de Agosto en una gran ciudad tiene la ventaja que la gran masa se ha ido fuera, pero para los valientes que quedamos no nos dejan mucho entretenimiento. Por eso estos últimos días, como ya os he anticipado al principio de esta entrada, me he marchado unos días con unos amigos.

¿Alguna vez habéis viajado a la playa con amigos? Comer arroz hervido con tomate frito el tiempo suficiente para necesitar todo el yogur que se tomaron José Coronado y Carmen Machi juntos…
Crear un ecosistema de desperdicios que no haya Fairy que lo limpie o levantarte por la mañana y no tener más que una cerveza que llevarte a la boca. Si os ha salido una sonrisa es que vosotros aún os estáis preguntando cómo pudisteis sobrevivir a tal desastre.

Pues en esas condiciones me hallé la semana pasada, lo único que aún no llevo bien es la sobredosis de bebida energética que tuve que ingerir para poder cambiar la hora del desayuno viendo el canal 24 horas por la de la comida-recalentada-antes-de-intentar-descansar-sobre-la-posición-que-caigas-en-el-camastro-que-te-toca-dormir-hoy.
Por cierto, este chico es mi nuevo ídolo.

Como os iba contando lo peor de esos viajes es la vuelta al trabajo, porque mi organismo se había acostumbrado a merendar con una "Steinburg" en la mano y ahora el agua me sabe hasta mal.
Aunque si en vez de con amigos decides hacer una escapada con amigas (no sabéis cómo me ha dado de si la semana) lo que no dejarás de beber serán mojitos incluso entre horas...
Por no decir que las condiciones de salubridad eran un millón de veces mejores y no encontrabas arena de playa incluso dentro de la cama.

Espero que entendaís que mi cuerpo va a necesitar en los próximos días una desintoxicación propia de Lindsay Lohan
Así que el resto de esta entrada os lo imagináis vosotros, ¡gracias por leerme!

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